Las personas ante todo
Pomellato ha adoptado un código deontológico compartido por sus gerentes y empleados, que atribuye un papel esencial a los recursos humanos y al respeto incondicional de los derechos de cada persona. El éxito de esta estrategia está confirmado por el bajo índice de rotación de la mano de obra y por la fuerte unión de los empleados con la empresa, algo que demuestra que un ambiente de trabajo tranquilo, sano y seguro es fundamental para garantizar continuidad y bienestar.